Roma – Mercato Centrale

Desde hace apenas un par de meses la estación Termini lleva dentro algo insperado: una selección extraordinaria de lo mejor de la cocina romana

Termini es la estación de trenes más grande de la península italiana y la segunda mayor de Europa, después de la Gare du Nord parisina –con salidas diarias a toda la bota y hacia destinos como la misma París, Munich y Basilea, se explica por qué recibe más de 150 millones de pasajeros al año–.

Dentro de ese hormiguero que contiene los sospechosos usuales, desde librerías hasta tiendas de maletas y restaurantes de comida rápida, hay una nueva adición inesperada y muy bienvenida: el Mercato Centrale. Desde principios de octubre de este año se han alojado 15 negocios locales de comida en un espacio de casi dos mil metros cuadrados con cara hacia la Via Giolitti. Ahí, con el denominador común de ser creadores de cocina auténtica, con una visión kilómetro cero y un apego a los ingredientes de calidad, hay unos 15 negocios que, según nos contó la dependienta de Bonci, «son los più top de la cocina romana». Justo en esa caseta, dominio del aplaudido chef Gabriele Bonci –los fans de Bourdain lo reconocerán por su aparición en el episodio de The Layover de Roma– probamos pizza in teglia alla romana en combinaciones de papa, salsiccia y más prosciutto cotto del que nadie jamás ha visto sobre un trozo de masa. Olvídense de toda la pizza que han probado, incluyendo en la misma Italia: la pizza del Lazio por pedazos es una cuestión artística, y la de Bonci hace que uno se lleve de la gula y después de probar dos se lleve tres pedazos más para el camino.

Igual pasó con el chocolate a la taza Stainer, hecho con una receta en base a crema panna en la caseta de Pierangelo Fanti –si lo quieren hacer en casa, no dejen de llevarse un sobrecito de la mezcla de cacao de origen dominicano, bautizado como Santo Domingo–. O los arancini variados y la torta Fedora en la caseta de Carmelo Pannocchietti, especializada en cocina siciliana. También habían queserías especializadas, panaderías, una gelatería, un café, un puesto de hamburguesas, otro de trapizzini y una caseta de pasta, pero desafortunadamente, el estómago tiene límites.

Si pasan por Termini –y seguramente les toca, si salen o entran por tierra en vez de usar el Fiumicino–, recuerden girar a la izquierda en la Piazza del Cinquecento hacia la Giolitti. Nos lo van a agradecer.

Foto: Dissapore

DECORACIÓN 5
AMBIENTE 4
COMIDA 5
UBICACIÓN 5

VEREDICTO

4.7
Roma – Mercato Centrale